La remodelación de la calle Carretas recuerda al mítico ´Café y Botillería de Pombo’
Tras unos meses de obras en la calle Carretas, ahora esta céntrica vía que comunica la Puerta del Sol con la calle Jacinto Benavente, se convierte en una calle peatonal en la que además se recuerda un mítico establecimiento decimonónico, el Café de Pombo.
Los amantes de la historia de Madrid y de los cafés literarios de finales del XIX y principios del XX, se sorprenderán al ver en el pavimento de la calle, unas letras doradas en las que puede leerse ‘4 ANTIGUO CAFÉ Y BOTILLERÍA POMBO’.

El Antiguo Café y Botillería de Pombo
Hasta el año 1950 en la calle Carretas nº4 se encontraba el Café y Botillería de Pombo, un establecimiento que paso a la posteridad porque en su sótano Ramón Gómez de la Serna instauró en 1914 su famosa tertulia literaria de los sábados por la noche denominada «La Sagrada cripta de Pombo»
“Sólo los sábados cambio toda la noche. Es cuando reúno a mis amigos en Pombo, y allí van los que han llegado a preguntar por mí durante la semana a Velázquez… La reunión dura hasta cerca de las tres, y hay noches taumatúrgicas en que se presenta el loco o el mendigo fantástico. Procuro precipitar todas las conversaciones en el nivelador humorístico y combato los fanatismos del energúmeno indígena… Después hay que dar cinco vueltas a la Puerta del Sol, y muchas noches otras dos o tres a la Plaza Mayor… El caso es ver los ojos claros del alba a través de los quevedos de la Puerta de Alcalá”

Se encontraba situado en un caserón enorme que daba a tres calles y donde también se encontraba el diario LA LIBERTAD.
El cronista de la villa Pedro de Répide nos cuenta en su ‘Las Calles de Madrid’ que en él se servían sorbetes de arroz a partir del día del Corpus y que a lo largo de su historia permaneció fiel a su aspecto y a su tradición.

Su nombre procedía de su dueño, un santanderino que llegó al Madrid de finales del siglo XVIII para abrir el negocio imperante de aquellos momentos, una botillería.
Las botillerías eran los establecimientos en los que se vendían y servían refrescos, licores o bebidas tan populares desde el Siglo de Oro como la aloja hecha a base de miel, canela, pimienta y agua.

Una de las botillerías más populares en Madrid fue Canosa que se encontraba en la Carrera de San Jerónimo y que contó entre sus parroquianos con Francisco de Goya y Lucientes.
El blog ‘Antiguos cafés de Madrid’ nos ofrece un relato excepcional sobre esta botillería: http://antiguoscafesdemadrid.blogspot.com/2017/08/botilleria-de-canosa.html

Posteriormente, ya en el siglo XIX, los gustos empezaron a cambiar y se pusieron de moda los cafés como lugares a los que acudían los liberales para defender sus ideales políticos y comenzaron a ponerse de moda las tertulias literarias como lugar de reunión de artistas y literatos.

Con este cambio de gusto, las botillerías se reconvertirían en cafés como es el caso de Pombo. Cuentan que en tiempos de la ocupación napoleónica acudía a los bailes y veladas de Pombo el mismísimo monarca José Bonaparte.
”Busco y encuentro Pombo, inmediato a la Puerta del Sol, detrás de su Ministerio de Gobernación, a un paso de todos los tranvías y por tanto propicio a todas las citas “ Ramón Gomez de la Serna

Hasta Pombo se acercaría en los años 30 el periodista y escritor catalán Josep Pla i Casadevall que se encontraba en la ciudad como enviado de La Veu escribiendo sobre él lo siguente:
“Pombo es un café silencioso y ochocentistas, con mesas rectangulares de mármol para cuatro personas, alargado, con forma de túnel, de techo abovedado y unos espejos anacrónicos en las paredes de un color melancólico. Es un café para ir a tomar chocolate con melindres y un vaso de agua a la española. Cada sábado, después de cenar, Ramón Gómez de la Serna lo que atrae a una banda innumerable de artistas, literatos, de escritores jóvenes”

El Antiguo café y Botillería Pombo estuvo abierto hasta 1942 para pasar a ser una tienda de maletas. Tras su cierre, en septiembre de 1950 tuvo lugar una almoneda donde sus enseres fueron vendidos.
El inmueble por desgracia no se conserva ya que en 1974 la piqueta municipal se lo llevaría por delante y se levantó un nuevo edificio que no seguía para nada la línea arquitectónica de la zona.

-Lo que conservamos del Café de Pombo
Aunque Pombo haya desaparecido, se conservan algunos recuerdos como la mesa de hierro y mármol blanco en la que tenía lugar la tertulia de don Ramón y que puede verse en el jardín del Magnolio del Museo del Romanticismo.
Esta mesa ingresó en el museo a través de la donación de los herederos de Mariano Rodríguez de Rivas, director del museo desde 1945 hasta 1958, amigo de Ramón y asistente a las reuniones del café, quién habría comprado la mesa en la almoneda final que tuvo lugar en 1950.

Además de la mesa en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía puede contemplarse el lienzo que el pintor José Gútierrez solana, miembro de la tertulia en Pombo, realizó a los miembros de la tertulia en el año 1920.
El lienzo estuvo expuesto en el Café de Pombo en el I Salón de Otoño de 1920 y posteriormente pasó a formar parte de la colección de Ramón Gómez de la Serna, quién en 1947, lo donó al Estado pasando a formar parte del Museo de Arte Contemporáneo y hoy puede verse en una de las salas del Reina Sofía

Los protagonistas de la pintura son algunos de los mas destacados intelectuales de la época, asiduos a la tertulia de Pombo: Manuel Abril, Tomás Borrás, José Bergamín, José Cabrero, Gómez de la Serna –de pie, en el centro de la escena– Mauricio Bacarisse, el propio Solana autorretratado, Pedro Emilio Coll y Salvador Bartolozzi.

Curiosamente hace algunos años el lienzo era sometido a una restauración en la que se llevaron a cabo ensayos no destructivos como los rayos X que revelaron que el pintor reutilizó la tela. Los rayos x dejaban ver cómo debajo de esta pintura de la tertulia se adivinaban elementos relacionados con una pintura de carácter religioso con un altar como protagonista.
Por su parte el Museo de Arte Contemporáneo de Madrid conserva e implementa en su sede de Conde Duque, el denominado ‘Museo Pórtatil’ donde puede admirarse una recreación del que fuese el despacho que Ramón Gómez de la Serna tenía en su torreón de la calle Velázquez.
Aunque el despacho sea recreado, los objetos de su interior son los originales ya que la mujer de Ramón los donó.

Asimismo conservamos fotografías ligadas a Pombo como las que he ido incluyendo en este articulo, documentos como la primera proclama de Pombo, y numerosas referencias literarias escritas por Ramón Gómez de la Serna como: ‘Pombo: biografía del celebre café y de otros cafés famosos’de 1941, ‘La sagrada cripta de pombo’ de 1923 o ‘Pombo’ de 1918.

A partir de ahora cuando pasen por Carretas 4, miren al suelo y recuerden la historia de este establecimiento.
Bibliografía:
- La Pieza del Mes del Museo del Romanticismo ‘La Mesa de Pombo’ por Mercedes Rodríguez Collado
- Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofia «La tertulia del café de Pombo: proceso de investigación y restauración».
- Pedro de Répide ‘Las calles de Madrid’
- Blog Antiguos Cafés de Madrid. “Botillería Canosa” http://antiguoscafesdemadrid.blogspot.com/2017/08/botilleria-de-canosa.html
- Peter Besas, (2009),”Historia y anécdotas de las fondas madrileñas”