El primitivo Monasterio de los Jerónimos renace el Museo de San Isidro

El primitivo Monasterio de los Jerónimos renace el Museo de San Isidro

El Museo de San Isidro rescata del olvido los restos arqueológicos del primitivo Monasterio de San Jerónimo el Real fundado por Enrique IV en 1464 . Estos restos, que fueron hallados en el contexto de las obras de ampliación del Museo Nacional del Prado, han sido cedidos como deposito por la pinacoteca para esta nueva etapa del Museo de San Isidro.

El blog Arte en Madrid nos cuenta en su reciente artículo ‘La historia de Madrid en un renovado Museo de San Isidro’ cómo ha quedado la renovación del museo y las novedades que este presenta, pero ahora nos centramos en los restos de este primitivo monasterio de los Jerónimos.

Reconstrucción del claustro del Monasterio de San Jerónimo El Real (gótico isabelino) en el Museo de los Orígenes. Foto propia
Reconstrucción del claustro del Monasterio de San Jerónimo El Real (gótico isabelino) en el Museo de los Orígenes. Foto propia

– El Monasterio de San Jerónimo el Real, una fundación real para Don Beltrán de la Cueva, válido de Enrique IV

Corría el año 1464 cuando el rey Enrique IV de Castilla (1425-1474) fundaba en el camino de El Pardo un convento con un claustro de estilo gótico isabelino erigido bajo la advocación de Santa María del Paso. Este monasterio se levantaba para conmemorar las hazañas del entonces válido monarca, D. Beltrán de la Cueva en las justas y torneos que se habían celebrado para solemnizar la llegada del Duque de Armarach, embajador de Bretaña.

El lugar escogido para levantar el monasterio no era casual. Se optó por el camino del Pardo porque fue allí dónde tuvieron lugar los torneos. Ese territorio hoy se correspondería y como apunta Inocencio Cadiñanos Barcedi en ‘Los claustros del Monasterio de San Jerónimo El Real’, cerca del actual Puente Verde.

Dobla Enrique IV de Castilla. Museo Arqueológico Nacional

El monasterio de Santa María del Paso pasaría a ser habitado por los monjes de la orden Jerónima y en tan solo un año después de su fundación, en 1465, pasaría a la advocación de San Jerónimo y a partir de entonces sería conocido como San Jerónimo el Real o del Buen Retiro.

Al tratarse la zona de terrenos pantanosos y poco salubres, los propios monjes solicitarían a los Reyes Católicos el permiso para trasladar su monasterio a otro lugar de la ciudad. Tanto los monarcas como el Papa Alejandro VI, quién concedería bula a los monjes, aceptaron la petición y es en 1502 cuando se procede al traslado.

<em> Claustro del Real monasterio de San Gerónimo de esta Corte. Francisco de Mora. Foto tomada del articulo 'Los claustros del Monasterio de San Jerónimo'. Ignacio Cadiñanos Bardezi</em>
Claustro del Real monasterio de San Gerónimo de esta Corte. Francisco de Mora. Foto tomada del articulo ‘Los claustros del Monasterio de San Jerónimo’. Ignacio Cadiñanos Bardezi

El nuevo Monasterio de San Jerónimo El Real, se trasladaría al este de la villa, a una parte que se encontraba extramuros en un pequeño alto sobre el arroyo del Valnegral. Los terrenos fueron adquiridos por trueques hechos con las parroquias de San Pedro, San Ginés y Santa Cruz por intermediación del Cardenal Cisneros, se corresponderían en la actualidad con la Iglesia de los Jerónimos y la ampliación del Museo del Prado. 

<em>Presentación de los restos del Monasterio del San Jerónimo el Real en el Museo de San Isidro. Foto propia</em>
Presentación de los restos del Monasterio del San Jerónimo el Real en el Museo de San Isidro. Foto propia

Es en el año 1503 cuando bajo las trazas de Enrique Egas se comienza la construcción del nuevo Monasterio de San Jerónimo el Real. Para su construcción, que terminaría en 1505, se emplearon materiales de la anterior construcción que se habían traído los monjes desde el camino de El Pardo. El tipo de construcción seguiría los modelos del momento para los dominicos y jerónimos del tipo del Monasterio del Parral de Segovia con iglesia, claustro y dependencias monacales.

“Cuando a comienzos del siglo XVI se levanta el nuevo monasterio, se hace aprovechando al máximo los materiales del viejo de Santa María del Paso “por que se pareciese al primero”, en frase del P. Sigüenza. Muchos de los elementos (columnas, capiteles, estaciones, pinturas…) mostraban claramente aquella procedencia, según A. Pons. En 1505 este claustro viejo o antiguo ya estaba concluido. A su rapidez, se deberían las deficiencias” (Los claustros del Monasterio de San Jerónimo. Ignacio Cadiñanos Bardezi)

Pronto el monasterio acogería actos oficiales como la jura como Príncipe de Asturias de Felipe II y continuaría creciendo levantándose un claustro nuevo, al oeste del anterior, en estilo plateresco en torno a 1550-1560. Sería Felipe II quien ordenaría a Juan Bautista de Toledo la construcción del cuarto real y de este nuevo claustro que se denominaría claustro viejo.

<em>El Monasterio de los Jerónimos y el Palacio del Buen Retiro en el plano de Teixeira, 1656. Plano de Arte de Madrid</em>
El Monasterio de los Jerónimos y el Palacio del Buen Retiro en el plano de Teixeira, 1656. Plano de Arte de Madrid

El claustro que hoy podemos ver integrado en el Museo Nacional del Prado, fue levantado en el lugar donde se levantaba el claustro gótico isabelino en torno a 1672. En cuanto al autor del mismo se apunta al arquitecto Fray Lorenzo de San Nicolás quien  lo realizaría en granito madrileño e incluiría en él escudos reales y de la orden jerónima.

Claustro de los Jerónimos en el Museo Nacional del Prado. Foto del Museo Nacional del Prado

-El primitivo monasterio de San Jerónimo renace en el Museo de San Isidro

El Museo de San Isidro, antes conocido como Museo de los Orígenes de Madrid ha renovado su museografía presentado novedades en su discurso. Una de ellas la encontramos en la ‘Sala Madrid, Villa Castellana’ donde cobran especial relevancia una serie de restos procedentes del Monasterio de Nuestra Señora del Paso, después Monasterio de San Jerónimo el Real.

Como he apuntado anteriormente estas piezas proceden del Museo Nacional del Prado, institución que las custodiaba desde que fuesen halladas en el contexto de la ampliación del Museo llevada a cabo por Rafael Moneo y su equipo desde el año 2000 hasta el año 2008.

<em>Restauración del Claustro de los Jerónimos. Foto propiedad del Blog Arte de Madrid.</em>
Restauración del Claustro de los Jerónimos. Foto propiedad del Blog Arte de Madrid.

Tres son los elementos de ese primer monasterio gótico del que hemos hablado al inicio que podemos contemplar en el Museo de San Isidro:

Por un lado un escudo de Enrique IV que probablemente se encontraría en la enjuta de uno de los arcos del monasterio.

Presentación de los restos del Monasterio del San Jerónimo el Real en el Museo de San Isidro. Escudo de Enrique IV.Foto propia
Presentación de los restos del Monasterio del San Jerónimo el Real en el Museo de San Isidro. Escudo de Enrique IV.Foto propia

Los restos de un arco de estilo gótico isabelino son los que cobran especial relevancia en la sala al ser contextualizados, mediante un vídeo mapping, en una recreación del claustro del monasterio.

Presentación de los restos del Monasterio del San Jerónimo el Real en el Museo de San Isidro. Foto propia
Presentación de los restos del Monasterio del San Jerónimo el Real en el Museo de San Isidro. Escudo de Enrique IV. Foto propia
Presentación de los restos del Monasterio del San Jerónimo el Real en el Museo de San Isidro. Foto propia

Por último, ya en la esquina de la sala, puede contemplarse un capitel de la construcción.


-Una reflexión

La importancia de estos restos es doble, no solo nos aportan información acerca de ese primitivo monasterio fundado por Enrique IV, sino que se suman a los pocos restos del gótico madrileño que nos quedan en la ciudad. Desde aquí mi felicitación al Museo de San Isidro por rescatar del olvido esta construcción y contárnosla a los madrileños en sus salas.

Tanto Arte de Madrid como yo, seguiremos investigando sobre este Monasterio de Nuestra Señora del Paso que después pasaría a ser de San Jerónimo. A los interesados en el tema, les recomiendo la lectura de estos tres artículos escritos por Celia Vinuesa, una de las arquitectas que colaboraron en la restauración del Claustro de los Jerónimos, en el Blog Arte de Madrid:

-La Restauración de los Jerónimos I: https://artedemadrid.wordpress.com/2009/03/22/la-restauracion-del-claustro-de-los-jeronimos-en-las-obras-de-ampliacion-del-museo-del-prado-i/

-La Restauración de los Jerónimos II: https://artedemadrid.wordpress.com/2009/04/17/la-restauracion-del-claustro-de-los-jeronimos-en-las-obras-de-ampliacion-del-museo-del-prado-ii/

-La Restauración de los Jerónimos III: https://artedemadrid.wordpress.com/2009/05/25/la-restauracion-del-claustro-de-los-jeronimos-en-las-obras-de-ampliacion-del-museo-del-prado-y-iii/

Sin más, se despide atentamente
El Sereno
El Sereno
Soy un sereno castizo pero del SXXI con un blog muy molón y pintón sobre Madrid en el que encontrarás curiosidades, historia, arte, cultura ocio y restaurantes. ¡De Madrid al cielo!
Esta web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario, ¿las aceptas?    Más información
Privacidad